sábado, 3 de marzo de 2012
La piedra
Camino por una calle con mi padre, no sé cuál es, pero la conozco. De pronto noto una herida en la mano, tengo la piel medio levantada justo donde empieza el dedo pulgar. Levanto la piel como si fuera la tapa de una caja y dentro está mi carne y una pequeña piedra. Quito la piedra y la tiro y entonces mi mano empieza a sangrar. No para de salir sangre y yo no consigo hacer nada, voy perdiendo fuerzas hasta que al final me desmayo o muero o me despierto.
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Todos tenemos una (o quizá más) espinita clavada en algún lugar. Quiero creer que al arrancarla en la vida real no pasa como en tu sueño.
ResponderEliminarNo sé! Yo no quiero tener nada D:
ResponderEliminarMe recuerda a la escena desagradable de Black Swan.
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