jueves, 8 de marzo de 2012
Gusanos
Yo estaba en la casa de mis abuelos, la de Valencia que normalmente no usan. Había mucha gente pero sólo recuerdo a mi padre. Yo estaba resfriada, lo cual no era sorpresa alguna pues llevo todo el invierno con resfriados y enfermedades tontas varias que me dejan sin poder respirar. Me sonaba los mocos una y otra vez y estornudaba, y en un momento determinado, cada vez que hacía esas cosas, de mi nariz no salían ya mocos solamente sino también gusanos blancos, muy parecidos a las orugas. Hablaba con mi padre y todo tenía sentido: si tenía asma y después las pruebas daban negativo era porque no era realmente el asma, sino los gusanos los que me impedían respirar y los que me mantenían enferma. Estaba podrida por dentro y los gusanos se habían hecho hueco en mi cuerpo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario