Sueño.

(Del lat. somnus).

1. m. Acto de dormir.

2. m. Acto de representarse en la fantasía de alguien, mientras duerme, sucesos o imágenes.

3. m. Estos mismos sucesos o imágenes que se representan.

miércoles, 29 de agosto de 2012

Bailout Marge Simpson

La furgoneta de Marge Simpson está atrapada en la nieve. Es la montaña con más nieve de la historia de la humanidad. Todos sufrimos mucho porqué van a morir y lo sabemos. No obstante, cuando parece que todo está perdido aparece su esposo, Mario Draghi, y les salva de una muerte lenta y dolorosa.
mario-monti
PD: es bonito porqué es una metáfora de como el BCE nos va a rescatar comprando deuda pública española.
PD2: el de la foto es Mario Monti, pero no tengo culpa yo de que en mi sueño fuese así.

lunes, 6 de agosto de 2012

Una boda importante

Era una boda importante, en un salón de esos para bodas importantes. Hasta yo mismo, tan en contra de vestir de etiqueta como siempre he estado, vestía un bonito traje comprado para la ocasión. Mis acompañantesAlbert y James, también lucían sus bonitos trajes. Nosotros no somos gente superficial, pero no obstante sabíamos como de poco apropiado era coincidir en la vestimenta en un acto tan destacado. Y así, de repente, la luz, el caos y la destrucción llegaron cuando por la escalinata central del salón - que en realidad era una réplica de un fotograma de Titanic - bajó el Presidente de la Generalitat con el mismo traje que Albert. Con su misma corbata. Con su misma camisa. Con sus mismos zapatos. Con su mismo peinado.


PD: como yo no soy muy de la escritura he considerado conveniente añadir un dibujo-esquema en Paint, disciplina que sí que domino.



miércoles, 1 de agosto de 2012

El río V


Salí de una biblioteca  y le pregunté a una chica por dónde tenía que ir para llegar a un partido de fútbol en el que jugaba el hermano de una amiga mía, ya que mi amiga estaba en el extranjero y el pobre niño iba a jugar sin nadie que le apoyase. La chica decía que estaba muy lejos, al lado del colegio X, cuya existencia yo desconocía. Me sentía tan desorientada que, tras seguir las indicaciones que me dio durante unos metros, y ver que la susodicha se besaba con un chico de cuya espalda colgaba una guitarra, entré en una tienda para preguntar. Allí, un hombre con cara de amargado leía una revista de espaldas a una ventana maravillosa por la que se veía un río con cisnes, barcas hinchables en forma de castillo moviéndose con las olas y un arcoiris en el cielo. Maravillada, le preguntaba qué era eso. ‘¡Pues el río V.!’ Yo, asombrada decía que pensaba que aquello era un secarral donde iba gente a pincharse. ‘Sí, como todo el mundo aquí…por eso sólo vienen japoneses…¿quieres un paseo en barca?’ Yo no quería que me timase como a una japonesa y rechazaba la oferta, así que me extendía un ticket de 4€ con algo por haberme dicho dónde me encontraba. Yo salía indignada y tras reflexionar un poco, volvía a entrar en el establecimiento a protestar, pero el hombre había sido relevado por una mujer de pelo corto que me ofrecía asistir a una conferencia sobre las brujas del río para compensar. Yo accedía y en el oscuro salón de la trastienda encontraba a dos compañeras de clase. Una de ellas sacaba del bolso unas pinzas de depilar de plata que yo pensaba que eran victorianas (aunque en la vida he visto un objeto como ese de dicha época). La ‘conferencia’ me parecía horrible: mal estructurada, peor documentada, buscando horrorizar a la audiencia…así que llegada la hora de las preguntas levantaba la mano por primera vez en mi vida y decía muy segura de mí misma: ‘¿Hasta qué punto considera usted que la brujería contribuyó al movimiento de liberación de la mujer?’ con la intención de destapar cuán poco académica era esa gente. No obstante, el resto de asistentes (menos mi amiga, que se depilaba las cejas) en vez de agradecérmelo, me echaba ante la mirada de odio de la ponente. Y ya está.